Las sentadillas son un ejercicio muy fácil de ejecutar con un resultado visible en un tiempo récord, eso sí, hay que ser constante y se debe de ir incrementando el número a realizar poco a poco.

Se trata de un tipo de ejercicio que trabaja la fuerza, resistencia y, además, quema grasa. 

El enfoque general son los músculos generales de las piernas (glúteos, isquiotibiales, cuádriceps y gemelos), así como los brazos, ya que se ejercitan con la extensión y más si se añade peso extra, pero en realidad es un ejercicio muy completo para todo el cuerpo.

.-Cómo realizarlas.

Lo primero que hay que hacer es colocarse correctamente, para ello hay que ponerse de pie con la espalda recta hombros relajados y los pies alineados con los hombros.

Se flexionan las rodillas, la cadera y los tobillos de manera que se baja lentamente hasta un ángulo de 90º, al mismo tiempo se van extendiendo ambos brazos progresivamente sin cometer el error de encoger los hombros (tal y cómo aparece en la imagen).

.-Básicas.

Se pueden realizar haciendo la bajada y subida cierto número de veces (se recomienda empezar por 10 e ir incrementando dicho número según la resistencia que se vaya alcanzando) siempre con un ritmo lento y tensando la musculatura.

.-Mantenidas.

En el caso de las sentadillas mantenidas, cuando se está en los 90º, en lugar de subir, hay que mantenerse en esta postura unos segundos (lo ideal es partir de 1 minuto e incrementar). El beneficio es bastante superior comparado con las sentadillas básicas, también cuesta más, pero el esfuerzo merece la pena.

.-Con peso.

Si se añade al ejercicio un peso extra, se obtendrá un resultado aún mayor. Se puede añadir mediante unas mancuernas, lo que ayudará a la parte correspondiente a los brazos, así como mediante una barra con discos de pesas colocando esta en la parte posterior de la cabeza sobre los hombros.

En ambos casos se pueden realizar tanto las básicas como las mantenidas con un resultado óptimo.